Los sistemas de frenos de aire utilizan aire comprimido para accionar los mecanismos de frenado, principalmente en camiones y remolques de gran tonelaje. Sus componentes principales incluyen un compresor de aire, un reservorio y válvulas de control para suministrar y regular la presión del aire a las cámaras de freno en cada extremo de la rueda. Estas cámaras convierten la presión del aire en fuerza mecánica, aplicando los frenos mediante varillas de empuje. La integridad del sistema depende de componentes como tuberías de aire, conexiones y válvulas de liberación rápida para mantener la presión y facilitar una respuesta rápida. Los sistemas modernos a menudo incorporan ABS, control de tracción y programas de estabilidad electrónica integrados con el circuito de frenos de aire para mejorar la seguridad y el control.