Los interenfriadores son intercambiadores de calor ubicados entre un turbocompresor o sobrealimentador y el colector de admisión. Su función principal es reducir la temperatura del aire comprimido, aumentando su densidad y mejorando la eficiencia volumétrica del motor. Su construcción típicamente utiliza un núcleo con diseños de aleta y tubo o de placa y barra, fabricado con aleaciones de aluminio para la conductividad térmica y la reducción de peso. Los interenfriadores emplean diseños tanto aire-aire como aire-líquido (refrigerados por agua), cada uno con características variables de caída de presión y capacidad de enfriamiento. Su rendimiento se evalúa por la caída de presión, la densidad de las aletas y la eficiencia térmica, influyendo en la presión de sobrealimentación y la potencia del motor. Los depósitos extremos son típicamente de aluminio fundido o plástico y están diseñados para configuraciones específicas de mangueras y montaje.