Las juntas son elementos estáticos diseñados para prevenir fugas de fluidos o gases dentro de los sistemas del vehículo. Se utilizan principalmente en aplicaciones de motor, transmisión e hidráulica, creando una barrera entre superficies de acoplamiento. Los materiales comunes incluyen caucho de nitrilo, silicona y fluoroelastómeros, seleccionados por su resistencia química y a la temperatura. Los diseños varían desde retenes tóricos y labiales hasta empaquetaduras y retenes de vástago de válvula, cada uno optimizado para condiciones específicas de presión y dinámica. Una correcta estanqueidad previene fallos de los componentes, mantiene la eficiencia del sistema y asegura la seguridad operativa.