Las bombas de vacío generan mecánicamente una fuente de vacío constante para los sistemas del vehículo que originalmente dependían del vacío generado por el motor. Se utilizan principalmente en motores diésel que carecen de un vacío convencional del colector de admisión, suministrando vacío para servofrenos, controles de climatización y sistemas de emisiones. Estas bombas utilizan un rotor excéntrico y paletas dentro de una carcasa para crear el vacío, accionadas por la correa de accesorios del motor. Los diseños internos a menudo incorporan lubricación con aceite para mejorar la durabilidad y reducir el desgaste. El rendimiento se mide típicamente en pulgadas de mercurio (in. Hg) o kPa, con diferentes caudales disponibles para adaptarse a las diversas demandas de las aplicaciones. Las unidades modernas pueden incluir válvulas de retención integradas y soportes de montaje para simplificar la instalación.