Los tensores, poleas tensoras y amortiguadores mantienen la tensión correcta de la correa y controlan las vibraciones armónicas dentro de los sistemas de transmisión serpentina y de distribución. Estos componentes se ubican a lo largo del recorrido de la correa, guiando y estabilizando su funcionamiento. Los tensores utilizan mecanismos de carga por resorte o hidráulicos para un ajuste automático, compensando el estiramiento y el desgaste de la correa. Las poleas tensoras giran libremente para modificar el recorrido de la correa y reducir la tensión por flexión. Los amortiguadores, específicamente los amortiguadores de vibración torsional, minimizan la resonancia armónica del cigüeñal, protegiendo los componentes del motor.