Los cuadros de instrumentos son centros de información del vehículo, típicamente integrados en el salpicadero directamente frente al conductor. Muestran datos críticos de funcionamiento como la velocidad del vehículo, las RPM del motor, el nivel de combustible, la temperatura del refrigerante y los mensajes de advertencia a través de indicadores analógicos, pantallas digitales, o una combinación de ambos. Los cuadros de instrumentos modernos incorporan cada vez más módulos programables, iluminación de fondo y ordenadores de viaje integrados. La comunicación se produce a través de redes CAN bus para recibir datos de varios sensores y unidades de control del vehículo. Los conjuntos del cuadro de instrumentos incluyen placas de circuito impreso, pantallas, lámparas indicadoras y movimientos de indicadores mecánicos, todo alojado dentro de una carcasa de plástico moldeado.